La Cámara de Diputados aprobó
este martes el proyecto de movilidad jubilatoria que impulsó el oficialismo,
que implica un nuevo robo a las jubiladas, los jubilados y las beneficiarias de
la Asignación Universal por Hijo (AUH) en medio del debate en la
Cámara de Senadores por el aborto legal.
Se trata de una nueva fórmula que convalida la pérdida de las jubilaciones de los últimos años y representa un saqueo a los adultos mayores.
En ese marco, el diputado Nicolás del Caño del PTS en el Frente de Izquierda denunció el ajuste, a la par que presentó su propio dictamen elaborado junto a diversas organizaciones de jubiladas y jubilados, de especialistas y defensores de la tercera edad, de trabajadores y trabajadoras y el Frente de Izquierda, por el 82 % móvil y para que ningún jubilado reciba menos que la Canasta del Jubilado.
En ese marco, sin embargo, tuvo lugar una nueva confesión de las intenciones de ajuste a los jubilados por parte del oficialismo: luego de la votación general del proyecto, Nicolás del Caño propuso una propuesta alternativa al artículo 1 del proyecto oficial que establecía que "el índice de movilidad se obtendrá conforme la fórmula que como anexo forma parte integrante de la presente ley. En ningún caso los haberes resultantes de la aplicación de dicho índice podrán ser inferiores a los que resulten de la aplicación del índice de precios al consumidor (IPC) en el mismo periodo, ni podrá disminuirse el haber que percibe el beneficiario".
Algunos de los legisladores del Frente de Todos habían planteado que debía haber una garantía para que la fórmula nunca pudiera estar por debajo de la inflación trimestral. Nicolás del Caño planteó que se votara en particular el artículo 1 con una modificación en ese aspecto de la ley, aclarando que estaba lejos de ser el proyecto que sostiene el Frente de Izquierda, pero que debía haber una garantía de que no se perdiera más frente a la inflación. Pero al votar en esa modalidad, esos legisladores oficialistas, incluyendo los dos pertenecientes al PCR, terminaron votando en bloque el dictamen de mayoría, dejando en claro, más allá de su discurso, cuál era la orientación de su voto. A confesión de partes, relevo de pruebas: el Frente de Todos avanza sin pausa en un nuevo ajuste a los jubilados, a pedido del FMI.
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